El Sesgo de Confirmación

El sesgo de confirmación es una tendencia cognitiva sutil pero muy influyente, que nos inclina a buscar, interpretar, favorecer y recordar la información de manera que ratifique nuestras creencias, hipótesis o ideas preexistentes.

Aunque en la práctica puede ser útil para encajar rápidamente nueva información en esquemas conocidos, también resulta perjudicial al limitar nuestra perspectiva y objetividad.

Búsqueda Selectiva de Información

Este sesgo se manifiesta en una búsqueda activa de datos o argumentos que apoyen lo que ya pensamos, mientras que, simultáneamente, tendemos a ignorar, desacreditar o minimizar la información que contradice nuestras posturas.

Esto es especialmente notable cuando se trata de temas ligados a nuestros valores fundamentales, como ideologías políticas o creencias religiosas.

Por ejemplo, una persona con una ideología política definida tenderá a consumir medios de comunicación y a participar en conversaciones que refuercen sus ideas, desestimando o distorsionando la información contraria, incluso si esta contiene elementos razonables.

Comodidad del Patrón y Ahorro de Energía

El cerebro tiende a la eficiencia y busca ahorrar energía. El sesgo de confirmación facilita esto al permitir que patrones de pensamiento preestablecidos procesen la información por nosotros, evitando el esfuerzo cognitivo de analizar perspectivas divergentes.

Encontramos comodidad en la información que encaja con lo que ya sabemos o con nuestros prejuicios.

Disonancia Cognitiva y Racionalización

El sesgo de confirmación también se relaciona con la forma en que manejamos las disonancias cognitivas, que ocurren cuando nuestras acciones o nueva información contradicen nuestras creencias sobre nosotros mismos.

Si una persona que se consi