Uso de [declaraciones con la palabra yo] y el modelo X-Y-Z

Para prevenir conflictos, es esencial dominar técnicas de comunicación que te permitan expresar tus sentimientos y necesidades sin hacer que la otra persona se sienta atacada.

Las "declaraciones con la palabra yo" son una de las herramientas más efectivas en este sentido.

En lugar de culpar o acusar, este enfoque te permite hablar desde tu propia perspectiva, centrándote en cómo te afectó una situación particular.

Por ejemplo, en lugar de decir "Me ignoras cuando hablo", que suena como una acusación directa, puedes reformularlo como "A veces, cuando estoy hablando, siento que no me estás escuchando".

Esta simple modificación traslada el foco de la culpa a tu propio sentimiento, lo que reduce la defensiva del receptor y abre la puerta a un diálogo productivo.

Una versión más estructurada de esta técnica es el modelo X-Y-Z, que proporciona una hoja de ruta para dar retroalimentación de forma constructiva.

X (el comportamiento): Describe el comportamiento específico sin generalizar. Por ejemplo, "Cuando te vi revisando tu teléfono durante la reunión”.

Y (el sentimiento): Explica cómo te sentiste al ver ese comportamiento. Por ejemplo, "me sentí frustrado".

Z (la necesidad): Finaliza con la necesidad que no se satisfizo, o la forma en que el comportamiento te impactó. Por ejemplo, "porque pensé que no estabas prestando atención a lo que decíamos y que te perdías de información importante para el proyecto".

Este modelo te ayuda a ser específico y a centrarte en el comportamiento que se puede cambiar, en lugar de juzgar el carácter de la persona.

La retroalimentación positiva también se beneficia de esta técnica.

Por ejemplo, puedes decir: "Hoy, cuando mantuviste el contacto visual durante nuestra conversación, aprecié tu compromiso".

El modelo X-Y-Z ayuda a evitar generalizaciones dañinas, a ser específico y a mantener el diálogo directo y respetuoso.

Resumen

uso de declaraciones con la palabra yo y el modelo x y z