Distorsiones Cognitivas. Falacias y [Deberías]

Las falacias de pensamiento y las afirmaciones basadas en "deberías" son patrones cognitivos que imponen expectativas rígidas e a menudo irracionales sobre uno mismo, los demás y el mundo.

Estas distorsiones pueden generar frustración, culpa, ansiedad y una visión inflexible de la realidad.

Adivinación del Futuro

Aunque no listada como una "falacia" per se en la fuente para este punto específico, la "adivinación del futuro" (mencionada en el Tema 6 Original como 2.2.7) es una distorsión estrechamente relacionada.

Consiste en predecir negativamente el futuro y tomar esas predicciones como hechos ciertos, sin considerar otras posibilidades.

Por ejemplo, "Sé que voy a suspender el examen" o "Esta relación no va a funcionar".

Esta anticipación negativa genera ansiedad y puede llevar a profecías autocumplidas.

Falacias de Pensamiento

Falacias que contribuyen al malestar:

• Falacia de Control: Se manifiesta en dos formas opuestas. O bien la persona cree que tiene un control total sobre todo lo que le sucede y es responsable de los sentimientos de los demás (omnipotencia), o bien siente que no tiene ningún control y es una víctima indefensa de las circunstancias (impotencia). Ambas son visiones extremas y poco realistas.

• Falacia de Justicia: Es la creencia de que la vida debería ser siempre justa y que las cosas deberían funcionar según las propias nociones de equidad. Cuando la realidad no se ajusta a estas expectativas (lo cual es frecuente), la persona experimenta resentimiento, ira o decepción.

• Falacia de Cambio: Es la expectativa de que otras personas cambiarán para adaptarse a nuestros deseos o necesidades si ejercemos suficiente presión, persuasión o sacrificio. Implica la creencia de que nuestra felicidad depende de que los demás modifiquen su comportamiento.

• Falacia de Razón: Consiste en creer que las propias emociones y opiniones son reflejos directos de la verdad objetiva y que, por lo tanto, uno siempre tiene la razón. Dificulta la aceptación de otros puntos de vista y la resolución de conflictos.

Los "Deberías" (Imperativos Categóricos)

Las afirmaciones basadas en "debería" o "tengo que" (imperativos categóricos) son reglas internas rígidas y a menudo poco realistas sobre cómo uno mismo, los demás o el mundo "deberían" ser.

Estas creencias imponen expectativas inflexibles y pueden generar una gran cantidad de culpa, frustración y ansiedad cuando no se cumplen.

Ejemplos incluyen: "Debería ser perfecto en todo lo que hago", "La gente debería tratarme siempre con respeto", "Nunca debería cometer errores".

Estas autoexigencias o exigencias a los demás pueden ser muy perjudiciales para el bienestar, ya que la realidad rara vez se ajusta a estos estándares absolutos.

Modificar estos "deberías" por preferencias o deseos más flexibles ("me gustaría que...", "preferiría que...") es un objetivo importante en la reestructuración cognitiva.