Meditación 2. La Atención Plena en lo Cotidiano (Lavarse los Dientes)
Transformando lo Rutinario en una Práctica
Esta meditación te enseña a llevar la atención plena a las actividades más comunes y rutinarias de tu vida diaria.
Vamos a utilizar el simple acto de lavarse los dientes para convertir una tarea automática en una poderosa práctica de mindfulness.
Aunque pueda parecer un ejercicio muy simple, requiere práctica para poder mantener la atención de forma sostenida y consciente.
El Propósito. Despertar la Conciencia en lo Cotidiano
El objetivo de este ejercicio es aprender a llevar tu conciencia a cada momento, viendo la vida tal y como se despliega.
Normalmente, cuando nos lavamos los dientes, nuestra mente está en cualquier otro lugar, pensando en los problemas del día.
Esta práctica busca romper ese piloto automático y anclarte en las sensaciones físicas del aquí y el ahora.
Al hacerlo, te permite sentir la vitalidad de tu propia vida, incluso en las tareas más aparentemente mundanas.
El Ejercicio Paso a Paso. Un Ritual Sensorial
La próxima vez que vayas a lavarte los dientes, quiero que prestes atención a todas las sensaciones involucradas en el proceso.
Siente la frialdad del tubo de la pasta de dientes mientras lo sostienes en una de tus manos.
Nota la firmeza de tus manos al apretar el tubo para poder colocar la pasta sobre tu cepillo de dientes.
Escucha con atención el sonido del agua del grifo mientras mojas las cerdas del cepillo antes de empezar.
Las Sensaciones del Cepillado. Tacto, Sonido y Sabor
Siente la frialdad inicial del cepillo y de la pasta de dientes cuando te lo llevas por primera vez a la boca.
Presta total atención al movimiento del cepillo mientras se mueve hacia arriba y hacia abajo por toda tu boca.
Concéntrate en la sensación de las cerdas sobre la superficie de cada uno de tus dientes y luego sobre tus encías.
Conviértelo en un ritual, recorriendo cada rincón de tu boca de forma consciente durante los dos minutos requeridos.
El Enjuague y el Cierre Consciente del Ritual
Cuando termines de cepillarte, presta atención al acto de escupir la pasta y de enjuagarte la boca con agua.
Siente la humedad del agua llenando cada rincón de tu boca mientras la mueves de un lado para otro.
Nota la energía con la que escupes el agua en el lavabo y la sensación de limpieza que queda después.
Para terminar el ritual, presta atención al gesto de secarte los labios y de mirarte en el espejo con calma.
La Vida Desplegándose Momento a Momento
Te recomiendo que practiques este ejercicio cada día
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