Cómo Preparar y Formular Buenas Preguntas

Ahora que comprendes la importancia de preguntar, veamos cómo preparar y formular preguntas que realmente jueguen a tu favor durante la entrevista.

La clave está en ser estratégico, demostrar interés y mantener una conversación en lugar de un interrogatorio.

Basar preguntas en la conversación previa (Escucha activa)

Una de las formas más efectivas de preguntar es conectando con algo que el entrevistador haya dicho durante la conversación.

Esto demuestra que has estado escuchando activamente y que tu interés es genuino, no guionizado.

Ejemplo: "Usted mencionó antes que la empresa está incursionando en Centroamérica. ¿Podría decirme cómo esperan que este cargo apoye esa expansión?".

Este tipo de pregunta personalizada ayuda a crear una conexión más fuerte.

Preparar una lista (6-7 preguntas) con antelación

No improvises tus preguntas. Prepara una lista de 6 o 7 preguntas relevantes antes de la entrevista.

¿Por qué tantas? Porque es probable que algunas de ellas se respondan naturalmente durante la conversación, y necesitas tener alternativas para no quedarte sin nada que preguntar al final.

Puedes llevar esta lista anotada de forma discreta.

Evitar preguntas obvias o cuya respuesta está en Google (Demostrar investigación)

Tus preguntas deben reflejar que has hecho tu tarea.

Evita preguntar cosas básicas cuya respuesta se encuentra fácilmente en el sitio web de la empresa o en una búsqueda rápida en Google (ej. "¿A qué se dedica la empresa?"). Hacerlo demuestra falta de interés y preparación.

En su lugar, formula preguntas que muestren que ya tienes un conocimiento base y buscas profundizar.

Adaptarse al estilo del entrevistador (Rapport)

Observa el estilo de comunicación del entrevistador y adapta sutilmente el tuyo. Si es una persona muy directa y seria, haz preguntas concisas.

Si es más conversador y amable, puedes permitirte preguntas un poco más abiertas. Esta sintonía (rapport) ayuda a crear una mejor conexión.

Usar preguntas para destacar fortalezas no mencionadas

Si sientes que durante la entrevista no tuviste la oportunidad de hablar sobre una fortaleza o experiencia clave que es relevante para el puesto, puedes formular una pregunta que te dé pie a mencionarla.

Ejemplo: "He visto que uno de los retos del puesto es [mencionar reto].

En mi experiencia anterior gestionando [situación similar], encontré que [tu enfoque/habilidad] fue muy efectivo. ¿Creen que ese enfoque sería útil aquí?".

Esto te permite reintroducir tus puntos fuertes de forma natural.

Tipos de preguntas a considerar

Aquí tienes algunas categorías de preguntas inteligentes que puedes preparar y adaptar:

Sobre el equipo: "¿Cómo es la dinámica del equipo con el que trabajaría?", "¿Con quién colaboraría más estrechamente?".

Sobre los retos del puesto: "¿Cuáles serían