Diferencias entre psicoterapia y farmacoterapia: indicaciones combinadas

El tratamiento del trastorno depresivo mayor puede abordarse desde dos grandes vertientes la psicoterapia y la farmacoterapia. Cada una tiene fundamentos, mecanismos de acción e indicaciones específicas. La psicoterapia se basa en la intervención psicológica estructurada para modificar patrones de pensamiento, emoción y conducta que contribuyen al malestar del paciente.

Existen diversas modalidades, como la terapia cognitivo-conductual (TCC), la psicoterapia interpersonal (IPT) o la terapia psicodinámica. Su aplicación suele ser especialmente útil en cuadros depresivos leves a moderados.

Por su parte, la farmacoterapia utiliza medicamentos antidepresivos para regular los neurotransmisores implicados en la depresión, como la serotonina, noradrenalina o dopamina. Es indicada principalmente en casos moderados a severos, o cuando hay riesgo de suicidio, síntomas psicóticos o deterioro funcional marcado.

Criterios para elegir entre psicoterapia, farmacoterapia o ambas

El grado de severidad de la depresión es el primer criterio clínico que orienta la decisión terapéutica.

• En episodios leves, se recomienda iniciar con psicoterapia, medidas de autocuidado y promoción de la actividad física.

• En casos moderados o graves, se indica el uso de antidepresivos, y es frecuente la combinación con psicoterapia como estrategia de mayor eficacia.

La evidencia respalda que el enfoque combinado de psicoterapia más farmacoterapia tiene mejores tasas de respuesta, menor probabilidad de recaída y mayor adherencia al tratamiento, especialmente en casos graves o crónicos.

Psicoterapia: ventajas y limitaciones

La psicoterapia tiene el gran valor de brindar herramientas al paciente para comprender su sintomatología, modificar esquemas mentales negativos y desarrollar estrategias de afrontamiento.

Es también un espacio para elaborar conflictos personales, pérdidas o traumas que puedan estar en la base del cuadro depresivo. Sin embargo, puede tener limitaciones en casos donde hay una inhibición cognitiva marcada, escasa motivación, ideación suicida intensa o síntomas psicóticos, condiciones que pueden requerir estabilización farmacológica inicial para que el trabajo terapéutico sea posible.

Farmacoterapia: ventajas y precauciones

La medicación antidepresiva puede actuar de forma más rápida en el alivio sintomático y es crucial en cuadros severos. Sin embargo, requiere seguimiento médico por los efectos secundarios, como aumento de peso, alteraciones del sueño