Alimentos procesados sin gluten

Los alimentos procesados son aquellos que han sido modificados de alguna manera para extender su vida útil, mejorar su sabor o textura, o para hacerlos más convenientes para el consumidor. Para este fin se les añade aditivos durante el proceso de elaboración, envasado, almacenaje y en ocasiones al ser transportados.

Son sustancias aprobadas para el consumo humano y siempre van a estar presentes de alguna forma en la gran mayoría de los alimentos procesados. Los aditivos no tienen valor nutritivo. Según su función pueden servir para aromatizar, dar color, conservar, edulcorar, espesar, etcétera. Pueden venir de plantas, animales, minerales o ser hechos en laboratorios.

Son muy útiles para preservar la inocuidad de los alimentos, para preservarlos de contaminación, y también para hacer el producto más atractivo para las personas.

Algunos de estos aditivos están hechos a partir de la proteína del gluten o la usan como soporte de otros aditivos. Las personas celiacas deben familiarizarse con estos componentes para asegurarse de no consumir gluten involuntariamente. Algo que pasa a menudo.

Los aditivos que comienzan por la letra E y le siguen 3 cifras no contienen gluten. Los que pueden contener gluten son los almidones modificados. Estos comienzan por la letra E, pero le siguen 4 cifras, desde el E-1404 al E-1450.

Algunos almidones modificados no contienen gluten o pueden clasificarse sin gluten gracias a su procesamiento en el que se purifica hasta conseguir que su consumo resulte seguro para los celiacos. En tal caso, lo debe indicar la etiqueta. Ante la duda es mejor no consumirlos.

Aunque muchos alimentos procesados contienen estos aditivos, hay muchas opciones disponibles para aquellos que siguen una dieta sin gluten. Los alimentos procesados sin gluten se pueden encontrar en tiendas especializadas y en la mayoría de los supermercados.

Los siguientes son algunos de los alimentos procesados comunes que no contienen gluten, o que pueden encontrarse en versiones sin gluten:

• Cereales para el desayuno: hay muchas opciones de cereales sin gluten disponibles en el mercado. Estos incluyen opciones a base de arroz, maíz, quinoa y avena sin gluten.

• Productos de panadería: existen una amplia variedad de productos de panadería sin gluten disponibles, como pan, galletas, bizcochos y pasteles.

• Carnes procesadas: las carnes procesadas sin gluten incluyen jamón, tocino, panceta, lacón, salazones y salmueras. Es importante leer siempre las etiquetas de los alimentos procesados de carne para asegurarse de que no contengan gluten.

• Productos lácteos: la mayoría de los productos lácteos no contienen gluten. La leche enriquecida, entera o desnatada. El queso fresco, el tierno, el fermentado, el curado o semicurado. El yogur natural.

• Huevos: ya sea fresco, en polvo, deshidratado o líquido.

• Sopas y caldos: las sopas y los caldos procesados pueden contener gluten, pero también hay opciones sin gluten disponibles. Se pueden encontrar enlatados, deshidratados y refrigerados.

• Salsas y aderezos: las salsas y los aderezos pueden contener gluten debido a los espesantes y a los ingredientes añadidos. Sin embargo, hay muchas opciones de salsas y aderezos sin gluten disponibles en el mercado como el tomate entero y triturado o sopas deshidratadas.

• Comidas preparadas: hay muchas opciones de comidas preparadas sin gluten disponibles. Estos incluyen platos congelados, comida para llevar y opciones de comida rápida.

• Aperitivos: los aperitivos procesados pueden contener gluten, pero también hay opciones sin gluten disponibles. Estos incluyen patatas fritas, pretzels, galletas saladas y palomitas de maíz.

• Conservas: legumbres cocidas o precocidas, al natural (no se recomiendan las lentejas). Pescados y mariscos en aceite, limón o al ajillo. Conservas de frutas en almibar y en compota.

• Hortalizas y verduras: deshidratadas, congeladas, cocidas o precocidas.

• Postres: Gelatina neutra, mermeladas y confituras, frutas desecadas, confitadas o glaseadas. Siempre revisar las etiquetas para mayor seguridad.

• Levaduras: impulsores y gasificantes como el bicarbonato sódico, ácido tartárico, sal de Seltz, sal de frutas). También las pastillas de levadura fresca.