Perder peso con la dieta carnivora

La dieta carnívora ha encontrado desde sus inicios tanta resistencia como apoyo de las comunidades del fitness y la nutrición. Lo cierto es que si bien puede parecer una dieta muy controversial, a lo largo del tiempo ha demostrado su efectividad ante enfermedades de diversas indoles y su valor nutricional como dieta para perder peso.

Hoy en día es más fácil comprender los fundamentos de esta dieta, y por qué comer solamente carne puede ayudarnos a perder peso con facilidad. A lo largo de esta guía te mostraremos cuáles son los motivos de su eficacia en la pérdida de peso y cómo puedes aprovecharla como alternativa razonable si tu intención es bajar esos quilos que tienes de más.

Eliminar la variedad de alimentos

Lo primero que podemos notar cuando analizamos la dieta carnívora es que es monótona respecto al tipo de alimento que podemos ingerir. Al eliminar la variedad de alimentos, y limitarla solo a las carnes, nos estamos despojando de todos esos productos ricos en azúcar y extremadamente dañinos para nuestro organismo.

Se reduce el consumo de aceites y aumenta considerablemente el aporte de proteínas. En principio, solo por hacer estos sencillos pasos estamos limitando las fuentes de las cuales nuestro cuerpo puede adquirir más peso, y favorecemos mediante el consumo de proteínas, los procesos de obtención de masa muscular.

Esto no es un aporte muy novedoso de la dieta carnívora, hace muchos años que contamos con estudios que avalan la tesis de que comer un solo tipo de alimento nos ayuda a perder peso, quizás el aporte está en comer solo carnes, ya que antes de popularizarse tanto esta dieta no eran muchas las personas que podian coincidir en que alguien podia alimentarse solo de carnes y llevar una vida saludable.

Ingerir un solo macronutriente

Siguiendo la lógica anterior, hay ciertas particularidades en ingerir solo carnes, la proteína animal como único aporte en macronutrientes satisface considerablemente nuestra sensación de apetito. Esto conlleva a que necesitemos menos calorías de lo habitual y que de forma voluntaria empecemos a comer menos de lo que comiamos antes.

Al disminuir la entrada de calorías a nuestro organismo generamos un déficit calórico, que no es más que la superioridad en la quema de calorías respecto a la obtención de las mismas. Todo esto como ya supondrás, se traduce inevitablemente en la pérdida de peso corporal.

Control de la insulina

Tener niveles altos de insulina en sangre puede sabotear cualquier intento por bajar de peso, la explicación de este fenómeno es que mientras más altos sean los niveles de insulina en nuestro organismo, más grasa acumulamos. La dieta carnívora ha demostrado una efectividad considerable en la disminución de la insulina en sangre, por ende esta dieta nos facilitará eliminar la retención innecesaria de grasa en nuestro organismo.

Aumento de los niveles de testosterona

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