Dietas populares: opciones saludables y sus beneficios

Llegamos a este punto, luego de haber desmitificado muchos aspectos que giran en torno a las dietas. Hemos analizado diversos factores que todo principiante debe conocer antes de emprenderse en un régimen alimenticio determinado, de forma tal, que cuando llegue ese momento puedas hacerlo con la preparación necesaria para maximizar los resultados esperados.

Dicho esto, se hace difícil seleccionar una dieta cuando navegamos entre tanta información. Cada experto te venderá su experiencia y puede que esta se encuentre sesgada por características biológicas muy propias de cada organismo, sin atender a las particularidades que todo principiante presenta.

Cuando buscamos una dieta, debes concentrarte en los fines que te brinda la misma, hay muchas formas de disminuir tu grasa corporal y es necesario que escojas aquella que mayormente se adapte a tus necesidades. No basta con testimonios felices, pues las características y el régimen al que se han sometido aquellos que brindan sus experiencias, no tienen que ser necesariamente las tuyas.

Dicho esto, lo primero es ser realistas. Luego debemos pensar qué condiciones tenemos a nuestro alrededor, ¿es favorable el ambiente? Quizás una dieta menos efectiva, o menos rápida puede ser la mejor para empezar, porque puede ser la indicada para comenzar sin tanta resistencia y acercarte hacia un régimen de vida que suele ser difícil al comienzo.

Entonces, nuestra recomendación es que te realices ciertas preguntas antes de escoger tu dieta para saber si esta se adapta a tus necesidades

¿Cuál es tu presupuesto?

Muchas veces se suele omitir este aspecto, pero es lógico que hay dietas más y menos costosas de mantener. Puede que al comenzar una dieta, el cambio de régimen alimenticio favorezca a tu bolsillo, pero en variadas ocasiones esto no sucede, sino que al aumentar la calidad de ciertos alimentos o combinarlos con otros planes y sesiones de entrenamiento, esto pueda suponer un aumento de tus gastos y por ende un aspecto que debas valorar antes de comenzar la dieta.

¿Qué tan flexible eres?

¿Te adaptas con facilidad? ¿Crees que puedes cambiar lo que comes de un día para otro?

Son cuestiones muy importantes, porque cómo vas a realizar una dieta a base de verduras si no puedes ni verlas. Tienes que considerar qué alimentos puedes tolerar a largo plazo, no puede ser un sacrificio comer lo que indica la dieta, porque esto puede derivar en dos cosas: o abandonas la dieta o te alimentas mal por no ingerir ciertas comidas.

¿Qué actividades físicas combinarás con la dieta?

Hay dietas para vagos y otras están pensadas para personas más activas. Como bien sabrás, siempre te recomendamos vincular la dieta con las actividades fisicas.

Mientras menos actividad física estés dispuesto a realizar, más intensa deberá ser la dieta. No obstante, es sabido que hay personas que preferirán una dieta mucho más intensa con tal de no pisar un gimnasio. La decisión final de cómo quieres bajar de peso es tuya, pero es deber nuestro alertarte de que los beneficios de hacer ejercicios no se reducen a bajar de peso, y que no existe dieta alguna que pueda brindártelos.

¿Es sostenible a largo plazo?

Las dietas constituyen un régimen de vida a seguir. No obtendrás ningún fruto haciendo dieta una semana, por eso no debes engañarte, no basta con que la puedas cumplir tres días, piensa en si te puedes adaptar a vivir así, si la respuesta es negativa mejor ni lo intentes.

La sostenibilidad es la clave fundamental a la hora de obtener resultados palpables, y el solo hecho de tener que abandonar una dieta por no poder seguir cumpliendo con la misma es un resultado frustrante que suele ser arrastrado hacia tu próximo intento de dieta. Es por ello que decíamos anteriormente que a veces una dieta menos intensa suele

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