Establece metas realistas

Las personas que encuentran su propósito de vida y trabajan para alcanzarlo suelen ser más felices y estar menos estresadas. Eso si consiguen no obsesionarse con obtener el éxito a toda costa y descuidar otras áreas de su vida, o si no sacrifican su integridad y su salud por el camino.

En este mundo tan competitivo lo que predomina en el ámbito profesional y de formación son las metas de desempeño que te impulsan constantemente a demostrar tus capacidades a otros y sobresalir en tu entorno pero eso no implica saber lo que se quiere realmente. Estas metas no representan una verdadera brújula en tu vida.

No establecer tus propias metas y objetivos es depender siempre de las circunstancias y de los objetivos de otros. Esto causa mucha ansiedad y detona comportamientos negativos o malos hábitos como la tendencia de dejar todo para después o justificarse, la critica y las quejas constantes.

Tener objetivos claros para guiarte promueve el cambio y el crecimiento personal. Es una práctica que te empodera y te brinda la sensación de controlar tu destino. Te ayuda a fijar la mirada en el futuro y sobreponerte a las experiencias pasadas que te retienen.

Importancia de las metas y los objetivos

No importa lo que quieras conseguir en la vida, una vez que lo descubras para llegar ahí es necesario planificarse. Establecer metas y objetivos es la única vía, o se quedará todo en sueños y fantasias.

Lo principal es descubrir qué quieres ser y qué quieres hacer exactamente, lo cual no es fácil y lleva mucha introspección. Necesitas parar tu ritmo habitual y dedicar un tiempo a reflexionar sobre esto porque es un proceso de cambio que requiere una fuerte inversión en ti mismo.

Las metas deben inspirarte, debes ser capaz de creer en ellas lo suficiente para mantener la motivación a través del tiempo. Es permitirte soñar pero con los ojos abiertos. El establecimiento de metas claras y concretas, te ayudará a definir los objetivos que necesitas cumplir. Mientras más personal y realistas sean más te empujarán hacia adelante.

Las metas son la visión, lo que quieres conseguir en un mediano o largo plazo. Los escalones que debes subir para alcanzarla son los objetivos. Estos suelen ser a corto plazo y medibles, por lo que mientras más específicos sean mejor. Los objetivos también deben ser realistas, o sea alcanzables.

Metas de dominio

Las mejores metas que te puedes fijar son las de dominio. El fin de estas metas es acumular conocimientos, capacidades y habilidades. Estas van encaminadas al crecimiento personal, a ser una mejor persona. Las habilidades que obtengas como consecuencia de conseguir este tipo de metas te servirán para cada área de tu vida, para conseguir un mayor rendimiento y estabilidad emocional. Son metas que de alcanzarse impactan en la formación de tu personalidad y autoestima.

Por ejemplo:

• Abandonar una adicción.

• Dejar de mentir.

• Dominar una emoción que te perjudica a ti y a otros.

• Tener un estilo de vida más saludable.

• Cambiar patrones de pensamiento que se interponen en tu superación o perjudican tus interacciones sociales.

• Trabajar en tu empatia.

• Trabajar en tus capacidades de liderazgo.
  

Formas de establecer las metas y los objetivos

Probablemente ya has intentado establecer objetivos para conseguir esa meta que quieres alcanzar pero por una razón u otra no ha cuajado y terminas abandonando tus propósitos. Estos son algunos consejos que debes tener en cuenta a la hora de fijar metas y objetivos.

En general para las metas ayuda:

• Calificar las metas de manera positiva: al pensar en tus metas de forma positiva aumentas tus posibilidades de alcanzarlas. Por ejemplo quiero estar saludable en vez de necesito hacer ejercicios, o necesito bajar 10 kilos. De esta forma siempre habrá un valor superior a pesar del resultado.
  
• Establecer metas para toda tu vida: no enfocarte en solo un área de tu vida, por ejemplo potenciar solo la profesional, descuidando la personal.
  
• Buscar ayuda si es necesario: no tenemos por qué hacerlo todo solos. Contar con alguien que nos motive, impulse y nos haga responsable por el cumplimiento de nuestros planes y nuestra organización nos hace más eficientes y hace el viaje más agradable.

Para los objetivos ayuda el conocido sistema SMART (por sus siglas en inglés), o sea que:

• Que sean especificos: te ayuda a tener un mayor control al asignarle tiempo y recursos. Qué quieres conseguir, por qué, en cuánto tiempo, quién puede ayudarte, etcétera.

• Que sean realistas: que puedas conseguirlos con los recursos que tengas en el momento o reconocer claramente si necesitas otros. Tener en cuenta las fortalezas y las debilidades. Igual es aconsejable que sean pocos pero bien definidos a que sean tantos que no puedas cumplirlos o te abrumes. De e
  
  
  
  

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