Moverse en la Fe vs. Moverse en el Miedo

Cada vez que nos enfrentamos a una decisión sobre nuestro futuro, tenemos ante nosotros dos caminos completamente opuestos.

Estos dos caminos son el miedo y la fe, que representan las dos caras de la misma moneda de la incertidumbre.

Podemos elegir vivir con miedo, esperando siempre el peor resultado posible, o podemos decidir vivir con fe en el mejor.

La mayoría de las situaciones de la vida son neutrales; somos nosotros quienes les damos una connotación positiva o negativa.

Es importante aclarar que esta fe no tiene nada que ver con la religión, sino que es una palabra de acción.

Una historia personal ilustra perfectamente estas dos perspectivas ante una misma situación de estrés e incertidumbre.

El autor y un amigo perdieron el último ferry para poder coger su vuelo de regreso al día siguiente desde una isla.

Sin un transporte aparente, la única solución que encontraron fue contratar a unos pescadores locales para que los llevaran de madrugada.

Desde el primer momento en que perdió el ferry, el autor se llenó de estrés, ansiedad y un profundo enfado.

Una vez en el pequeño barco pesquero, en mitad de la noche, su mente comenzó a imaginar los peores escenarios posibles.

Se imaginó que serían secuestrados, asesinados o que les quitarían los órganos, convirtiéndose en una noticia trágica.

Vivió todo el trayecto en un estado de pánico, con taquicardia y temblores, convencido de que iba a suceder una catástrofe.

Mientras tanto, su amigo Peter vivió la misma situación de una manera completamente diferente, desde una perspectiva de fe.

Se mantuvo tranquilo y proactivo, buscando soluciones en lugar de quedarse paralizado por el miedo a lo que pudiera pasar.

Tuvo fe en que los pescadores eran personas honradas que simplemente los iban a llevar a su destino sin problemas.

No se dejó llevar por la paranoia, sino que confió en el mejor resultado posible, lo que le permitió estar en paz.

Esta historia nos enseña que la decisión de cambiar tu perspectiva es lo que separa el camino del miedo del de la fe.

moverse en la fe vs moverse en el miedo