Educar en familia con el ejemplo en el buen uso del móvil

El Cerebro Espejo: Los Niños como Imitadores

La educación en el uso de la tecnología no se basa en lo que los padres dicen, sino en lo que los padres hacen.

Los menores, especialmente en la infancia y adolescencia temprana, operan a través de las "neuronas espejo"; su principal forma de aprendizaje es la imitación.

Si un padre le dice a su hijo que "deje el móvil" mientras él mismo no levanta la vista de su propia pantalla, el mensaje verbal queda anulado por el ejemplo conductual.

El mensaje real que recibe el niño es: "El móvil es lo más importante, más que yo".

Educar con el ejemplo significa que los adultos deben ser los primeros en adherirse a las normas del hogar.

Si se establece que "en la mesa no hay móviles", esta regla debe ser sagrada, especialmente para los padres.

Si el adulto interrumpe una conversación cara a cara con su hijo para atender una notificación trivial, está enseñando que la conexión digital es prioritaria sobre la conexión humana.

Desconexión Digital para la Conexión Familiar

El buen uso del móvil implica saber cuándo no usarlo. El ejemplo más poderoso que pueden dar los padres es el de la presencia plena.

Esto significa designar momentos y espacios del día que sean "santuarios" libres de tecnología, no solo para los niños, sino para toda la familia.

La cena, el desayuno, los trayectos en coche o la hora de acostarse son momentos cruciales para la conexión familiar, y deben estar libres de interrupciones digitales. Los padres deben modelar activamente la "desconexión".

Esto incluye gestos como poner el móvil en silencio y boca abajo durante la cena, o anunciar "Voy a dejar el móvil aquí porque ahora voy a jugar contigo".

Este comportamiento enseña al niño que la tecnología es una herramienta al servicio de la vida, y no al revés.

Modelar la Gestión de Conflictos y la Empatía Online

El "buen uso" no es solo sobre el tiempo, sino sobre el cómo. Los padres educan con el ejemplo cuando muestran cómo gestionan su propia vida digital.

Si un padre está en un grupo de WhatsApp y se queja en voz alta ("¡Mira qué tontería ha dicho este!"), está modelando el dissing o la queja.

Si, por el contrario, evita participar en grupos tóxicos, se sale de ellos o no reenvía chismes, está modelando la integridad.

Incluso la gestión de la frustración tecnológica es un ejemplo.

Si el WiFi va lento y el padre grita o maldice, enseña una baja tolerancia a la frustración.

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