10 consejos de ciberseguridad para videojuegos

Proteger la Cuenta (La Puerta de Entrada)

El mayor activo del jugador es su cuenta, donde almacena sus juegos, su progreso y, a menudo, los datos de su tarjeta de crédito.

El primer consejo es crear una contraseña robusta y única. Nunca se debe reutilizar la contraseña del correo electrónico o de las redes sociales.

Si los hackers roban la base de datos de una plataforma de juegos (algo que ocurre), probarán esa contraseña en todas partes.

El segundo consejo, y el más importante, es activar la Autenticación de Dos Factores (2FA).

Casi todas las plataformas (Steam, PlayStation, Xbox, Epic Games) la ofrecen.

Esto añade una capa extra de seguridad (un código a tu móvil) que impide que alguien entre, aunque te roben la contraseña.

El Peligro del Phishing y el Software Ilegal

Los jugadores son un objetivo principal del phishing. El tercer consejo es desconfiar de las ofertas "demasiado buenas para ser verdad".

Los hackers envían correos falsos que imitan a la plataforma, ofreciendo juegos gratis, skins o monedas virtuales (V-Bucks, Robux) si haces clic en un enlace e inicias sesión.

El enlace te lleva a una web clonada donde te roban la contraseña. Nunca inicies sesión desde un enlace de un correo.

El cuarto consejo es no descargar software pirata o "trucos" (cheats). Este tipo de software ilegal es el vehículo número uno para infectar el ordenador con malware (virus).

Cuando el jugador instala un "mod" no oficial o un programa para hacer trampas, a menudo está instalando un keylogger (que roba sus contraseñas) o un ransomware (que secuestra su ordenador).

Gestión de la Información Personal y los Pagos

El quinto consejo es la gestión de la identidad: nunca uses tu nombre real como nickname (apodo) en el juego. Un nickname debe ser anónimo.

El sexto consejo es no compartir jamás información personal en el chat de voz o texto (dónde vives, a qué colegio vas).

El griefing y el acoso (doxing) comienzan cuando el agresor obtiene datos del mundo real.

El séptimo consejo es gestionar los pagos.

Si se almacena una tarjeta de crédito en la plataforma, esta debe estar protegida por el 2FA.

Es preferible usar métodos de pago intermedios como PayPal o tarjetas prepago, que no exponen los datos bancarios principales.

Octavo, configurar la privacidad: la mayoría de plataformas permiten