Prevención y visualización del ciberacoso contra mujeres y niñas

La Visualización como Primera Herramienta de Prevención

El primer paso para prevenir la ciberviolencia de género es dejar de normalizarla y minimizarla.

Durante décadas, este tipo de acoso se ha desestimado con excusas como "es solo un piropo online", "son bromas" o "si te expones, es lo que hay".

La visualización consiste en nombrar el problema: no son bromas, es acoso; no es un piropo, es hostigamiento sexual; no es un "lío de pareja", es control coercitivo. Visualizar también implica recopilar datos y exponer casos.

Cuando las víctimas (especialmente figuras públicas) denuncian las amenazas que reciben, ayudan a que la sociedad entienda la magnitud del problema.

La prevención pasa por educar a la sociedad (especialmente a los hombres y niños) para que reconozcan estas conductas no como algo normal, sino como actos de violencia inaceptables.

Educación en Igualdad y Masculinidades No Violentas

La prevención del ciberacoso contra las mujeres no puede ser solo tecnológica (privacidad, contraseñas); debe ser educativa y estructural. La raíz del problema es la desigualdad de género.

Por lo tanto, la prevención más eficaz es la educación en igualdad desde la primera infancia.

Esto implica desmantelar estereotipos de género, enseñar el respeto mutuo y el valor del consentimiento.

Es fundamental trabajar en nuevas masculinidades o masculinidades no violentas.

Se debe enseñar a los niños y adolescentes varones que el control, los celos y la posesión no son "pruebas de amor", sino formas de violencia.

Educar en una masculinidad que no se base en el dominio sobre las mujeres es la única forma de cortar el problema de raíz, creando hombres que no sientan la necesidad de acosar.

Empoderamiento Digital y Redes de Apoyo

La prevención también incluye empoderar digitalmente a las mujeres y niñas.

Esto significa darles formación en seguridad digital (privacidad, 2FA, gestión de contraseñas), pero también enseñarles sus derechos.

Deben saber qué es un delito (el stalking, la difusión no consentida), cómo recopilar pruebas (capturas de pantalla) y cuáles son los canales de denuncia (policía, plataformas).

Además, es vital fomentar las redes de apoyo (sororidad digital).

Cuando una mujer sufre un ataque misógino online, la respuesta de otras mujeres apoyándola, denu