El modelo de Thomas-Kilmann
El Modelo de Modos de Conflicto de Thomas-Kilmann (TKI) es una herramienta fundamental que clasifica cinco estilos principales de respuesta ante un conflicto, basándose en dos dimensiones: la asertividad (el grado en que se intenta satisfacer las propias necesidades) y la cooperación (el grado en que se intenta satisfacer las necesidades de los demás).
No existe un estilo "correcto" o "incorrecto", ya que la eficacia de cada uno depende del contexto y del resultado deseado.
Los cinco estilos de manejo del conflicto
Competir (asertivo, no cooperativo): Este estilo se utiliza para imponer las propias necesidades por encima de las de los demás.
Es apropiado cuando el resultado es más importante que la relación, como en negociaciones a corto plazo o situaciones de crisis donde se necesita tomar una decisión rápida y firme.
En una crisis, no se puede acomodar a quienes están equivocados; si sabes lo que hay que hacer, debes afirmarte y tomar el control.
Acomodar (no asertivo, cooperativo): En este modo, se prioriza la relación por encima del resultado.
Se usa cuando el costo de ganar el conflicto es menor que el valor de mantener una relación armoniosa.
Un ejemplo perfecto es elegir una película con tu pareja: acomodar sus preferencias fortalecerá la relación y, de todos modos, pasarán una buena noche.
Evitar (no asertivo, no cooperativo): A veces, el mejor curso de acción es evitar el conflicto por completo.
Este estilo es útil cuando la situación no es importante, pero también se puede usar como una solución temporal en dos casos clave.
Falta de preparación: Si no estás listo para defender tu posición, evitar el conflicto te permite prepararte mejor para volver más tarde y buscar una solución que funcione para todos.
Tensión emocional alta: Cuando las emociones están a flor de piel, el conflicto podría ser peligroso.
Alejarte hasta que todos se calmen es la mejor manera de mantener el control y buscar una solución racional en un momento más oportuno.
Comprometer (moderadamente asertivo y cooperativo): El compromiso es una solución intermedia en la que ambas partes ceden algo.
No se fortalece la relación, pero tampoco se daña gravemente.
Es una buena opción cuando el resultado y la relación son importantes, pero no lo suficiente como para justificar un gran esfuerzo.
Colaborar (asertivo, cooperativo): Considerado el estándar de oro para lograr un resultado de ganar-ganar, la colaboración es el estilo más difícil de aplicar, ya que requier
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