El Valor de las Redes Diversas

Beneficios Estratégicos y Superación de la Homofilia

En entornos corporativos donde la demografía directiva es mayoritariamente masculina, el cultivo deliberado de amistades profesionales con mujeres es un activo estratégico subestimado.

Para las mujeres, estas conexiones combaten el aislamiento y aumentan el sentido de pertenencia, la lealtad y el compromiso con la organización, factores críticos para la retención del talento.

Para los hombres, ampliar el círculo de confianza más allá de sus pares de género conlleva ventajas competitivas: acceso a flujos de información diferentes, redes más amplias y una mejora sustancial en habilidades de inteligencia emocional y comunicación.

Sin embargo, existe una barrera natural conocida como el sesgo de afinidad o homofilia: tendemos a socializar y confiar en quienes se parecen a nosotros. Un líder inclusivo debe auditar su red de contactos.

Si al revisar sus diez contactos más frecuentes en el trabajo todos comparten su mismo género y perfil, está limitando su perspectiva.

Las mujeres se benefician enormemente de redes mixtas, y los líderes masculinos que rompen la inercia de "el club de chicos" obtienen una visión más completa del negocio.

Una táctica efectiva es solicitar explícitamente ser entrenado o recibir coaching por una mujer experta en un área ajena a la propia; esta inversión de roles es transformadora.

Mentoría Recíproca y la Trampa del Ego

Al establecer estas relaciones, es común que los hombres con antigüedad caigan en el arquetipo del "gurú".

Este perfil asume una posición unilateral de sabiduría: "Yo te enseño cómo funciona el mundo, tú escuchas y aprendes".

Esta dinámica es una trampa del ego que se siente amenazada si se cuestiona su saber.

Las relaciones laborales más fructíferas con mujeres son aquellas donde se disuelven las jerarquías de poder y se establece una asociación bilateral de crecimiento.

En lugar de una transmisión vertical de conocimientos, se debe buscar el intercambio de capital intelectual.

Imaginemos una alianza donde un director senior aporta su visión política de la empresa, mientras que una gerente junior aporta su dominio sobre nuevas tendencias de mercado digital. Ambos ganan.

Además, es vital recordar la fluidez del poder: la colega que hoy recibe consejo, mañana puede ocupar una posición clave que sea determinante para el avance del mentor original.

Para iniciar este tipo de mentoría sin incomodidad, se recomienda comenzar ofreciendo apoyo en proyectos específicos ("He visto tu propuesta, ¿has considerado este enfoque?") y evitar centrarse en una sola persona para