Segundo uso de la coma

Uso de la coma para delimitar las unidades con alto grado de independencia respecto al enunciado en que se insertan. En esta función se pueden distinguir los tres casos siguientes:

• Para separar las interjecciones.

• Para separar los vocativos.

• Para separar los apéndices confirmativos.

Uso de las coma para separar las interjecciones: Las interjecciones son palabras o grupos de palabras que expresan por si solas estados de ánimos, sentimientos, emociones etc. Ejemplos: ¡hola!, ¡adiós!, ¡Dios mio!, ¡ojalá!, ¡ay!, ¡menos mal!, ¡ojo!, ¡bah!

Las interjecciones cuando se emplean en una oración deben estar separadas por comas del enunciado principal. Si aparecen al principio o al final de la oración exigen solo la coma de apertura o cierre, respectivamente y si aparecen en medio de la frase quedarán encerradas entre dos comas. Ejemplos:

• Ya tienen un sus manos el examen, ¡ojo!, no olviden poner bien claro el nombre.

• ¡Menos mal!, se tardaron pero llegaron sin contratiempos.

• Mejor no pensemos más en eso, ¡bah!

Uso de la coma para separar los vocativos: Un vocativo es una palabra o frase que se utiliza para llamar o dirigirse a una persona o a varias personas. Los vocativos más empleados son los nombres propios, pero también existen otros vocativos muy utilizados. Ejemplos: amiga, señores, niños, maestra, alumnos, jóvenes, Licenciada, señorita.

Los vocativos se deben introducir en los enunciados, separados por comas. Como ocurre con las interjecciones, los vocativos si aparecen al principio o al final de la oración exigen solo la coma de apertura o cierre, respectivamente y si aparecen en medio de la frase quedarán encerrados entre dos comas. Ejemplos:

coma 2