La Asertividad y sus Derechos Básicos
La asertividad es una habilidad comunicativa crucial que permite a una persona expresarse de forma abierta y honesta, defendiendo sus propios derechos y necesidades sin dejar de respetar los de los demás.
Se trata de un equilibrio fundamental, ya que una persona asertiva no es ni pasiva (ignorando sus propios derechos) ni agresiva (ignorando los de los demás).
La asertividad se basa en el reconocimiento de una serie de derechos básicos que toda persona merece tener, y en la comprensión de que estos derechos conllevan responsabilidades.
Los Derechos de la Asertividad
Una persona asertiva reconoce que tiene una serie de derechos fundamentales que deben ser respetados.
Entre ellos se encuentran: Derecho a juzgar el propio comportamiento, pensamientos y emociones.
Esto implica que cada persona es responsable de sí misma y de sus acciones, sin necesidad de la aprobación de los demás.
Derecho a ser tratado con dignidad y respeto.
Toda persona tiene derecho a que sus sentimientos y opiniones sean considerados de forma seria.
Derecho a decir "no" sin sentirse culpable.
La asertividad otorga la libertad de establecer límites y rechazar peticiones que no se ajustan a las propias prioridades o necesidades, sin tener que justificarse.
Derecho a equivocarse.
Ser asertivo implica aceptar que no se es perfecto y que se pueden cometer errores.
Esta aceptación fomenta la humildad y el crecimiento, ya que se ve el error como una oportunidad de aprendizaje, no como una falla personal.
Derecho a expresar sus sentimientos y opiniones.
Una persona asertiva no reprime sus emociones, sino que las comunica de forma directa y honesta, utilizando frases como "yo pienso" o "yo siento".
Responsabilidades hacia los Demás
La asertividad no se trata de imponer la propia voluntad, sino de un ejercicio de equilibrio.
Los derechos de una persona asertiva vienen acompañados de responsabilidades hacia los demás.
Esto significa que, del mismo modo que se exige respeto, se debe ofrecer el mismo respeto a los demás.
Se tiene la responsabilidad de permitir que los otros tomen sus propias decisiones, cambien de opinión y rechacen nuestras peticiones.
Una persona asertiva es
la asertividad y sus derechos basicos