El Diario como Herramienta Central
Tu Diario como Espacio Sagrado de Sanación
Si el proceso de re-parentarte es un enfoque central para ti, entonces tu diario se convertirá en tu nuevo mejor amigo.
Este no es un simple cuaderno, sino un espacio sagrado y seguro diseñado exclusivamente para la comunicación con tu mundo interior.
Es la herramienta más importante para poder establecer un diálogo claro y sanador entre tus diferentes partes internas.
Con el tiempo y la práctica constante, este ejercicio se volverá cada vez más fácil y sencillo de realizar.
La Técnica de las Dos Manos. Dando Voz a tus Partes Internas
La técnica principal consiste en utilizar tus dos manos para escribir, asignando a cada una de ellas un rol específico.
Este método te permite dar una voz clara y diferenciada tanto a tu niño interior como a tu Padre Amoroso.
Utilizarás tu mano no dominante para escribir como el niño, y tu mano dominante para responder como el adulto.
La Mano No Dominante. El Canal de Expresión del Niño Interior
Para comenzar, toma tu diario y escribe con tu mano no dominante, permitiendo que tu niño interior se exprese libremente.
El uso de la mano no dominante ayuda a sortear la mente analítica, permitiendo una comunicación más auténtica y emocional.
Permite que tu niño interior te diga absolutamente todo lo que quiera contarte, sin filtros, juicios o censura.
Es muy importante que le des a tu niño interior todo el espacio y el tiempo que necesite para expresarse.
No debes apresurarlo; si al principio no quiere hablar, simplemente tienes que ser paciente y crear un espacio seguro para él.
Tal vez quiera decirte que echa de menos jugar, o quizás quiera expresar su enfado por haber sido ignorado.
La Mano Dominante. La Respuesta Compasiva del Padre Amoroso
Una vez que tu niño interior te haya dado un mensaje claro, es el turno de que tu Padre Amoroso responda.
Cambia a tu mano dominante, la que usas habitualmente para escribir, y responde a lo que el niño ha dicho.
La función de esta voz es la de escuchar, validar, consolar y ofrecer apoyo incondicional a tu niño interior.
Debe ser una respuesta llena de compasión, comprensión y amor, como la que le daría un padre ideal a su hijo.
El Diálogo Sanador. Claves para una Práctica Efectiva
A partir de aquí, puedes establecer un diálogo escrito entre las dos partes, dejando que la conversación fluya naturalmente.
No hay una duración correc
el diario como herramienta central