Superando el Miedo Escénico: Entendiendo la Glosofobia
El miedo a hablar en público, conocido técnicamente como glosofobia, es una de las formas de ansiedad social más comunes y paralizantes.
Sin embargo, entender su origen evolutivo es el primer paso para aprender a gestionarlo y transformarlo en una ventaja.
El miedo a hablar en público como uno de los temores más comunes
Hablar en público es, para muchas personas, una de las actividades más temidas, a menudo superando el miedo a las alturas o incluso a la muerte.
Este temor, conocido formalmente como glosofobia, no es una fobia rara, sino uno de los miedos más comunes que experimentamos como seres humanos.
Se clasifica como un tipo de ansiedad social, similar al miedo escénico, y su impacto puede ser devastador, impidiendo que personas talentosas compartan sus ideas, asuman riesgos y avancen en su carrera profesional.
La respuesta de "lucha o huida" y su origen evolutivo
Este miedo no es un signo de debilidad, sino una respuesta fisiológica de "lucha o huida" profundamente arraigada en nuestro cerebro.
Su origen es evolutivo: para nuestros antepasados, la supervivencia dependía de pertenecer a un grupo.
Ser juzgado, rechazado o aislado de la tribu era, literalmente, una sentencia de muerte.
Aunque hoy en día el entorno es seguro, nuestro cerebro límbico no distingue entre un depredador real y el "peligro" de ser juzgado por una audiencia.
Por eso, al ponernos de pie frente a un grupo, nuestro sistema nervioso activa la misma alarma de supervivencia, como si nuestra vida estuviera en peligro.
Síntomas físicos y psicológicos de la ansiedad escénica
La respuesta de "lucha o huida" desencadena una cascada de síntomas tanto psicológicos como físicos.
En el plano psicológico, la persona puede experimentar una sensación de fatalidad inminente y pensamientos obsesivos sobre el fracaso.
Físicamente, el cuerpo reacciona con temblores, un ritmo cardíaco acelerado, sudoración, mareos y náuseas.
Es común que la boca se seque y que la voz se debilite o se quiebre, y que las notas tiemblen en las manos.
Estos síntomas son la manifestación externa de la tormenta de adrenalina que se produce internamente.
Cómo reencuadrar el miedo y usar la adrenalina a tu favor
La clave para superar el miedo escénico no es eliminar la adrenalina, sino reinterpretarla. Los síntomas físicos del miedo son casi idénticos a los de la excitación.
En lugar de pensar "estoy asustado", puedes reencuadrar el pensamiento a "estoy emocionado" o "estoy lleno de energía".
Esta técnica te permite canalizar esa energía nerviosa y utilizarla para potenciar tu presentación.
La adrenalina que antes te paralizaba puede ahora convertirse en
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