Cómo Mantener la Palabra Cuando te Interrumpen
Por qué ceder la palabra ante una interrupción puede proyectar falta de confianza
En un entorno profesional, ser interrumpido es un desafío común.
La reacción instintiva de muchas personas es detenerse, pedir disculpas ("lo siento" o "discúlpame") y ceder la palabra.
Sin embargo, este comportamiento, aunque educado en apariencia, es un error estratégico.
Al ceder el espacio tan fácilmente, se proyecta una imagen de falta de confianza y se comunica de manera no verbal que nuestras propias ideas no son lo suficientemente importantes como para ser defendidas.
Esta pasividad puede mermar nuestra credibilidad ante el resto del público (colegas, superiores, clientes), que puede interpretar la interrupción como una señal de que nuestro argumento era débil o irrelevante.
La técnica anti-interrupción de 3 pasos
Para mantener la palabra de forma asertiva pero no agresiva, se puede emplear una técnica de tres pasos que combina lo no verbal y lo verbal para un máximo impacto:
Lenguaje Corporal Inmediato: En el instante en que comienza la interrupción, abre los ojos un poco más e inclina la cabeza ligeramente hacia adelante.
Este es un gesto instintivo que señala atención y firmeza, comunicando que no vas a retroceder.
Gesto de Parada: Simultáneamente, levanta una mano con la palma hacia la persona que interrumpe.
Este es el gesto universal de "parada" y actúa como una barrera física, clara y respetuosa para detener la intrusión.
Declaración Firme: Acompaña los gestos con una frase corta y directa para reclamar tu turno.
Frases de poder a utilizar: "Permíteme terminar la idea" o "Sigo hablando"
La declaración verbal debe ser breve, firme y pronunciada sin perder el ritmo del discurso.
En lugar de disculparte, utiliza una frase de poder asertiva.
Dos opciones muy eficaces son:
"Permíteme terminar la idea, por favor."
"Un momento, sigo hablando." La clave es pronunciar la frase y, sin esperar respuesta, continuar inmediatamente con tu argumento.
Esto no abre un debate sobre la interrupción; simplemente la detiene y redirige la atención hacia tu mensaje, demostrando control y seguridad.
Cuándo es apropiado usar esta técnica y cuándo es mejor ceder la palabra
Esta técnica es una herramienta poderosa, pero no debe usarse indiscriminadamente.
Antes de aplicarla, es necesario hacer un rápido análisis de coste-beneficio.
No es una técnica para usar con un superior jerárquico o una figura de autoridad respetada; en esos casos, la deferencia estratégica de ceder la palabra suele ser la opción más inteligente.
La técnica anti-interrupción es más apropiada en reuniones con pares, debates, o
como mantener la palabra cuando te interrumpen