El Problema de la Honestidad y la Coherencia
La honestidad es el pilar sobre el que se construye cualquier relación sólida.
Cuando una persona no es honesta, ya sea por miedo a una confrontación, por querer gestionar la imagen que los demás tienen de ella o por cualquier otro motivo, se genera una comunicación incoherente.
Esta falta de coherencia entre lo que se dice y lo que se hace erosiona la confianza, que es la base de cualquier relación saludable.
La Honestidad y la Coherencia
La Confianza y la Coherencia: La confianza en una relación se construye a lo largo del tiempo, a medida que las acciones de una persona se alinean con sus palabras.
Una persona que es honesta y coherente es vista como alguien predecible y fiable.
Por el contrario, una persona que dice una cosa y hace otra es vista como alguien poco fiable y, con el tiempo, la desconfianza se apodera de la relación.
El Miedo a la Confrontación: A menudo, las personas no son honestas porque temen la confrontación.
Se mienten a sí mismas y a los demás para evitar una discusión o para obtener algo que quieren.
Sin embargo, como se ha visto, la verdad siempre termina por salir a la luz, y la consecuencia de esta deshonestidad es un conflicto mucho mayor y más destructivo.
La Autenticidad y el Conflicto: La honestidad, aunque a veces puede generar un conflicto a corto plazo, es la única forma de construir una relación auténtica.
Ser honesto con los demás es una forma de ser honesto con uno mismo.
La Incoherencia y la Falta de Fiabilidad
La falta de coherencia en la comunicación puede manifestarse de diversas formas.
Una persona puede prometer algo en un momento de entusiasmo, pero luego no lo cumple.
O puede tener un comportamiento que no se alinea con lo que dice que valora.
En todos estos casos, la falta de coherencia genera una falta de fiabilidad.
La otra persona, al no poder confiar en la palabra de la primera, se vuelve desconfiada y cautelosa, lo que dificulta la comu
el problema de la honestidad y la coherencia