Coaching Individual (Uno a Uno)

El Coaching Ágil Individual representa el nivel más personal y directo de intervención, centrándose en una única persona (el coachee).

Aunque a menudo surge como soporte dentro de iniciativas de coaching empresarial o de equipos, también puede ser un proceso independiente para el desarrollo específico de un individuo en el contexto ágil.

Este tipo de coaching requiere una conexión profunda y de confianza entre el coach y el coachee.

El proceso, aunque más corto en duración total (típicamente de 1 a 8 semanas como soporte), sigue las fases generales de preparación, ejecución (a través de sesiones estructuradas) y cierre, adaptadas a la escala individual.

La clave es facilitar el autodescubrimiento y la acción por parte del coachee.

Foco en Necesidades y Desarrollo Personal/Profesional

La preparación en el coaching individual es crucial y se centra en comprender profundamente al coachee.

El primer paso es identificar las necesidades específicas (tanto sentidas por el coachee como observadas por el coach o la organización) y las capacidades actuales de la persona.

A partir de ahí, se definen conjuntamente los objetivos y resultados clave que se buscan alcanzar a través del proceso de coaching.

Esto asegura que el coaching esté alineado con las aspiraciones del coachee y/o las expectativas organizacionales.

Fundamentalmente, se deben establecer acuerdos claros sobre la confidencialidad, la frecuencia de las sesiones y las responsabilidades mutuas.

Crear un espacio de confianza y establecer la presencia constante y atenta del coach son requisitos indispensables para que el coachee se sienta seguro para explorar y crecer.

La Dinámica Coach-Coachee (Escucha, Preguntas, Acción)

La ejecución del coaching individual se materializa en sesiones (de 25 a 45 minutos aprox.) donde se desarrolla una dinámica específica:

• Escucha Activa: El coach escucha atentamente mientras el coachee "ventila" o expone sus ideas, preocupaciones y contexto.
• Articulación y Enfoque: El coach ayuda al coachee a articular claramente el tema central o el objetivo de la sesión. Puede reforzar conceptos ágiles si es relevante.
• Exploración: Utilizando preguntas poderosas y técnicas de visualización, el coach guía al coachee a explorar su situación, sus opciones y su potencial, sin darle soluciones directas. El coach ayuda a recordar metas y acciones previas.
• Ideación y Diseño de Acciones: El coachee genera ideas y posibles acciones para avanzar hacia su objetivo. El coach mantiene el impulso y apoya este proceso creativo.
• Compromiso y Acción: El coachee selecciona las acciones que tomará. El coach apoya este compromiso y ayuda a establecer mecanismos de responsabilidad (accountability). Finalmente, se reconoce el progreso y el esfuerzo del coachee.

Esta dinámica iterativa busca empoderar al coachee para que encuentre sus propias soluciones y se apropie de su desarrollo.

Resumen

El Coaching Ágil Individual es el nivel más personal y directo. Se centra en una única persona (coachee) para su desarrollo específico.

La preparación es crucial, enfocándose en las necesidades del coachee. Se definen objetivos claros y se establecen acuerdos de confidencialidad y confianza.

La ejecución se da en sesiones (25-45 min). Se usa la escucha activa, preguntas poderosas y se diseñan acciones, empoderando al coachee.