El Ciclo del Acoso: Análisis de las Fases Iniciales

Fase de Conflicto: El Incidente Desencadenante

El acoso psicológico no surge del vacío; generalmente tiene su génesis en un conflicto interpersonal no resuelto o mal gestionado.

En esta etapa embrionaria, la disputa puede parecer normal, originada por diferencias de criterio técnico, competencia por recursos o roces organizativos.

Sin embargo, lo que distingue el inicio del mobbing es que el conflicto deja de centrarse en el "problema" para focalizarse en la "persona".

El agresor, incapaz o poco dispuesto a resolver la diferencia mediante el diálogo, decide que la eliminación del oponente es la única solución viable.

Es un momento crítico donde la intervención temprana de un líder puede detener el proceso, pero si se ignora o se minimiza como "cosas de niños", la semilla de la violencia germina rápidamente transformando una discrepancia laboral en una persecución personal.

Fase de Estigmatización y Acoso Propiamente Dicho

Una vez que el agresor ha decidido atacar, entramos en la fase de estigmatización.Aquí se despliega el arsenal de hostigamiento sistemático.

El objetivo ya no es ganar una discusión, sino destruir la reputación y el equilibrio psicológico de la víctima.

Se adoptan comportamientos de exclusión, ridículo público, difusión de rumores y críticas constantes al trabajo.

La víctima, confundida, comienza a preguntarse "¿qué he hecho mal?", entrando en un estado de indefensión.

El agresor recluta aliados (conscientes o inconscientes), conocidos como "mobbers secundarios", que se suman al ataque por miedo a ser las próximas víctimas o por congraciarse con el poder, aislando aún más al objetivo.

Fase de Intervención Empresarial: La Doble Victimización

Paradójicamente, cuando la dirección o el departamento de Recursos Humanos intervienen en esta etapa, a menudo lo hacen en detrimento de la víctima.

Al no tener formación específica para detectar la manipulación del agresor, la empresa tiende a ver el problema como un "conflicto de dos" o, peor aún, asume la narrativa del acosador que etiqueta a la víctima como "conflictiva", "sensible" o "de bajo rendimiento".

En lugar de proteger al agredido, la organización comienza a cuestionarlo, sometiéndolo a evaluaciones médicas o traslados forzosos, lo que constituye una victimización secundaria.

El sistema inmunológico de la organización, en lugar de atacar el virus (el acosador), ataca al órgano sano que señala la enfermedad (la víctima).

Resumen

El acoso suele nacer de un conflicto mal resuelto donde el agresor deja de centrarse en el problema para atacar a la persona, buscando su eliminación.

En la fase de estigmatización, el agresor despliega hostigamiento sistemático mediante burlas y rumores, reclutando aliados o "mobbers secundarios" para aislar socialmente a la víctima.

La intervención empresarial suele fallar, generando una doble victimización al etiquetar al agredido como conflictivo y someterlo a evaluaciones médicas en lugar de sancionar al acosador.