Evalúa la receptividad de tus clientes

Evalúa la receptividad de tus clientes

Las sesiones de descubrimiento son fundamentales para construir un perfil integral del cliente que abarque sus aspectos profesionales, personales y emocionales. No todos los clientes llegan con el mismo nivel de motivación o receptividad; por lo tanto, aunque hagamos un buen trabajo, los resultados no serán iguales para todos, ya que la información se procesa de manera diferente entre quienes están realmente receptivos y quienes no están en la mejor disposición durante la sesión.

En esta guía, analizaremos algunos aspectos clave relacionados con la importancia de evaluar la receptividad de nuestros clientes, con el fin de adaptar nuestras estrategias y acciones a su estado emocional.

En qué influye conocer qué tan receptivos se encuentran nuestros clientes?

El servicio de un coach está íntimamente ligado a la interacción interpersonal y a la capacidad del cliente para asimilar la información y aplicar los conocimientos adquiridos para resolver sus problemas y potenciar su desarrollo personal y espiritual. Cuando el cliente se muestra receptivo, la comunicación fluye más fácilmente, lo que permite que asimilen efectivamente cada orientación y se comprometan de manera consciente con el trabajo a realizar.

Por lo tanto, entender el nivel de receptividad de nuestros clientes es crucial, ya que esta información nos ayuda a construir estrategias comunicativas que faciliten una relación sostenible, incluso si el cliente no se encuentra en su mejor momento emocional.

Elabora estrategias comunicativas para cada cliente en particular

Según el grado de receptividad del cliente, será necesario ajustar las estrategias comunicativas que empleemos. Si el cliente no está receptivo durante nuestras sesiones de coaching, debemos utilizar recursos que nos permitan crear un ambiente de confianza, donde podamos relajar tensiones y ofrecer el espacio adecuado para que el cliente se desenvuelva de manera efectiva sin que los contenidos se vean afectados.

La habilidad y perspicacia del coach son fundamentales, ya que debe determinar la mejor manera de transmitir la información, respetando cada momento y ofreciendo los tiempos necesarios para mejorar el estado emocional del cliente.

Lleva el control de la evolución del cliente

Cuando notes que tu cliente no se encuentra receptivo y esto afecta el desarrollo de las sesiones, aplica estrategias para mejorar su estado anímico. Para evaluar la efectividad de estas estrategias, lleva un control riguroso del estado emocional del cliente a lo largo del tiempo. Realiza anotaciones periódicas, puntuando del 1 al 5 cuán enfocado y receptivo se sintió el cliente durante cada sesión. Así podrás determinar si necesitas ajustar las estrategias que estás utilizando.

Involucra al cliente en los desafíos que enfrentará; debe entender que este es un trabajo conjunto y que no puede esperar que su estado emocional mejore sin comprometerse a trabajar en él de forma activa. Puedes compartir tu evaluación y observaciones sobre lo que has percibido en cada sesión, para que el cliente sea consciente de su progreso y de si necesita seguir trabajando en su desarrollo.

No te preocupes por tener períodos difíciles; esto es normal en todos los aspectos de la vida. Lo importante es nuestra capacidad para sobreponernos y enfrentar los desafíos.