Lecciones prácticas: complacencia y preparación
No se puede juzgar el comportamiento de alguien observándolo en estado no excitado
La primera gran lección de este estudio es que no podemos fiarnos de cómo creemos que nosotros o los demás actuaríamos en un estado de pasión.
Existe una enorme brecha entre nuestro 'yo' en estado de calma y nuestro 'yo' en estado de excitación.
No debemos ser complacientes y pensar 'esto a mí no me pasaría'.
La importancia de no ser complaciente y estar preparado para lo peor
Esta conciencia nos debe llevar a estar más preparados.
No podemos confiar en que nuestra fuerza de voluntad o nuestra moralidad se mantendrán intactas en el calor del momento.
Debemos tomar precauciones por adelantado.
Consejos prácticos: llevar protección siempre, tener conocimientos de autodefensa
Esto tiene aplicaciones muy concretas. Por ejemplo, es una buena idea llevar siempre protección anticonceptiva, no solo cuando se planea tener una relación.
Porque los planes y las intenciones pueden desvanecerse rápidamente cuando la excitación entra en escena.
También es importante tener conocimientos de autodefensa y de cómo establecer límites claros.
La conciencia como herramienta de prevención
La conciencia sobre este fenómeno es, en sí misma, una poderosa herramienta de prevención. Si sabemos que nuestro juicio se verá alterado, podemos ser más cautelosos.
Podemos evitar situaciones de riesgo. Y podemos tener conversaciones honestas con nuestras parejas sobre estos temas cuando estamos en un estado de calma, estableciendo acuerdos y límites claros por adelantado.
Resumen
El estudio revela que no podemos juzgar el comportami
lecciones practicas complacencia y preparacion