Clasificación de los trastornos neurocognitivos

Los trastornos neurocognitivos son condiciones médicas que afectan la función cognitiva, como la memoria, el pensamiento y el razonamiento. En esta sesión, exploraremos detalladamente las diferentes categorías de trastornos neurocognitivos, sus características y cómo se diagnostican.

Clasificación de los Trastornos Neurocognitivos

Trastorno Neurocognitivo Mayor: Anteriormente conocido como enfermedad de Alzheimer, este trastorno es la forma más común de demencia. Se caracteriza por un deterioro progresivo de la memoria y otras habilidades cognitivas.

Trastorno Neurocognitivo Leve: En esta categoría, los síntomas cognitivos son evidentes pero aún no son lo suficientemente graves como para ser considerados como un trastorno mayor. Puede ser una etapa temprana de la enfermedad de Alzheimer u otros trastornos.

Trastorno Vascular Neurocognitivo: Este trastorno está relacionado con problemas de flujo sanguíneo en el cerebro y puede resultar en deterioro cognitivo debido a múltiples infartos cerebrales o pequeños accidentes cerebrovasculares.

Trastorno Neurocognitivo Debido a la Enfermedad de Cuerpos de Lewy: Caracterizado por fluctuaciones en la cognición, alucinaciones visuales y problemas motores similares a la enfermedad de Parkinson.

Trastorno Neurocognitivo Debido al VIH: Resulta de la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y puede afectar las habilidades cognitivas.

Trastorno Neurocognitivo Debido a Sustancias: Ocurre como resultado del abuso de sustancias, como alcohol o drogas, y puede ser reversible con la abstinencia.

Trastorno Neurocognitivo Frontotemporal: Se caracteriza por cambios en la personalidad y el comportamiento, así como en la función cognitiva, y afecta principalmente las áreas frontal y temporal del cerebro.

Diagnóstico de los Trastornos Neurocognitivos

Evaluación Clínica: Un diagnóstico adecuado comienza con una evaluación clínica completa que incluye entrevistas con el paciente y sus cuidadores, pruebas cognitivas y pruebas de laboratorio para descartar otras causas de los síntomas.

Historial Médico y Familiar: El historial médico y familiar puede proporcionar información importante sobre la presencia de trastornos neurocognitivos en la familia o factores de riesgo.

Neuroimágenes: La resonancia magnética (RM) y la tomografía com