En la presentación anterior conocimos entre otras cosas que la energia aportada por los carbohidratos se puede obtener a muy corto plazo si ingerimos carbohidratos simples (azúcar, miel, dulces, leche, frutas, etcétera); y en un plazo mayor, si ingerimos carbohidratos complejos: pan integral, patatas, pastas integrales, etcétera. Además aprendimos que de manera general los carbohidratos complejos son más saludables que los simples.
En esta presentación te brindaremos las recomendaciones dietéticas para el consumo de carbohidratos; también te explicaremos las consecuencias que pueden provocar el seguimiento de planes de comidas con déficits o excesos de este macronutriente; y nos referiremos a los requerimientos especiales de carbohidratos que necesitan las personas que realizan ejercicios fisicos intensos o practican deportes.
La cantidad de carbohidratos que debemos ingerir depende de factores como la edad, el sexo, el nivel de actividad fisica que realice y los trastornos de salud. Sin embargo de manera general se recomienda que una dieta equilibrada incluya entre un 45% y un 65% de la energia total consumida en forma de carbohidratos, principalmente complejos ya que reducen los riesgos de padecer obesidad, diabetes, trastornos gastrointestinales y algunos tipos de cáncer.
Se recomienda también que el aporte calórico de los carbohidratos simples no supere el 10% de la energia total consumida. Debemos aclarar que el consumo moderado y de forma ocasional de azúcares, no supone ningún riesgo para la salud y puede proporcionarnos placer, aumentando la variedad y el gusto por algunos alimentos.
Para limitar la ingesta de energia con el fin de bajar de peso o por padecer diabetes mellitus se pueden emplear en lugar de azúcar, sustancias capaces de proporcionar sabor dulce a los alimentos aportando poca o ninguna energia.
Estas sustancias denominadas edulcorantes se pueden obtener a partir de sustancias naturales, por ejemplo, el jarabe de glucosa se obtiene a partir del almidón. También existen edulcorantes artificiales, como el aspartamo y el ciclamato, que pueden llegar a ser 200 veces más dulce que el azúcar común sin aportar energia.
Sin embargo, los beneficios y riesgos del consumo de estas sustancias se continúan estudiando, y muchos especialistas advierten que el uso habitual de éstas, podria provocar adicción a los alimentos dulces, incrementando su consumo de manera significativa, lo que favoreceria el incremento del peso y aumentaria el riesgo de obesidad.
Como explicamos hoy los carbohidratos complejos deben aportar un poco más de la mitad de toda la energia que el organismo demanda diariamente. En la actualidad por la tendencia a la reducción del consumo de pan, patatas y leguminosas, el consumo de carbohidratos complejos está muy por debajo de esa cifra. Sin embargo, las personas habituadas a las comidas pre-elaboradas, los refrescos industriales, las chucherias y las comidas rápidas, que se exceden en el consumo de carbohidratos simples si corren el riesgo de padecer las siguientes enfermedades:
Como sabemos los carbohidratos son los encargados de suministrar energia a todos los músculos y tejidos del organismo, incluyendo al cerebro. Por lo tanto, los atletas deben prestar especial atención al tipo y cantidades de carbohidratos que ingieren ya que un consumo escaso de carbohidratos antes, durante y después de la realización de prácticas o competencias, provocarian el agotamiento de las reservas energéticas almacenadas, apareciendo sintomas como cansancio, fatiga, calambres y falta de concentración o de ideas para implementar nuevas tácticas.
Las cantidades de hidratos de carbono recomendadas dependen del gasto energético total, del sexo, del tipo de deporte y de las condiciones ambientales; por lo general, para un entrenamiento diario de intensidad moderada de una hora de duración, se indican entre 3 y 7 gramos diarios por kilogramo de peso corporal; y entre 7 y 12 gramos diarios por kilogramo de peso, durante los entrenamientos de resistencia.
La mayor parte de los hidratos de carbono que se incluyan en la dieta del atleta deben ser complejos: arroz integral, pastas integrales, patatas, batatas, pan integral y legumbres. Los hidratos de carbono simples que se recomiendan tomar son las frutas y los productos lácteos, que aportan además de la energia, numerosos nutrientes.