Fisiología de la Confianza ([Power Poses])

El Impacto Hormonal de la Postura

Nuestra fisiología no solo refleja nuestro estado mental, sino que puede crearlo activamente.

Ciertas posturas expansivas, a menudo denominadas "posturas de poder", pueden hacernos sentir genuinamente más seguros.

Investigadores han estudiado este fenómeno midiendo los niveles hormonales de los participantes antes y después de adoptar estas posturas.

Específicamente, midieron el cortisol, la hormona relacionada con el estrés, y la testosterona, la hormona vinculada a la confianza y la dominancia.

A un grupo de participantes se le pidió que adoptara posturas de poder (expansivas, como poner las manos en las caderas, ocupar espacio o poner los pies sobre un escritorio) en una habitación privada durante solo dos minutos.

A otro grupo se le pidió adoptar posturas de bajo poder (encogidas, protegiéndose, ocupando el mínimo espacio).

Los Resultados del Experimento

Los resultados de estos experimentos fueron extraordinarios.

Aquellos que adoptaron las posturas de poder vieron cómo sus niveles de testosterona aumentaban en un 20%, mientras que sus niveles de cortisol (estrés) disminuían en un 25%.

Se sentían literalmente más confiados y menos estresados.

En el grupo que adoptó posturas de bajo poder, ocurrió exactamente lo contrario: la testosterona disminuyó en un 10% y el cortisol aumentó en un 15%. Estos participantes informaron sentirse más débiles y menos confiados.

Esto demuestra científicamente que al cambiar deliberadamente nuestra postura física, podemos cambiar nuestra química interna y, por lo tanto, nuestro estado mental y emocional.

Aplicación Práctica (Antes de un Evento Importante)

El objetivo de esto no es sugerir que adopte posturas arrogantes, como poner los pies sobre la mesa, durante sus reuniones de trabajo. El mensaje es que puede usar esta técnica de forma estratégica.

Suponga que está a punto de entrar a una entrevista de trabajo, dar una presentación importante o tener una reunión con un cliente clave.

Si se siente nervioso, busque un lugar privado unos minutos antes (un baño, una oficina vacía).

Aíslate por uno o dos minutos y adopta una de estas posturas de poder: levanta los brazos en señal de victoria, pon las manos firmemente en las caderas con el pecho abierto.

Esta simple acción puede aumentar su confianza y reducir su estrés, y esa nueva actitud se reflejará en su lenguaje corporal cuando entre a la reunión. Los demás lo percibirán como más capaz y carismático.

Resumen

Nuestra fisiología no solo refleja nuestro estado mental, sino que puede crearlo activamente. Ciertas posturas expansivas, o "posturas de poder", pueden hacernos sentir genuinamente más seguros.

Estudios midieron los niveles hormonales. Adoptar posturas de poder por solo dos minutos aumentó la testosterona (confianza) en un 20% y disminuyó el cortisol (estrés) en un 25%.

La aplicación práctica es usar esta técnica de forma estratégica antes de un evento importante. Busque un lugar privado y adopte una postura de poder por dos minutos.