Reaccionando al Desacuerdo
Cuando te sientes más cómodo compartiendo tu opinión y disintiendo, es natural que la otra persona también disienta contigo.
En estos casos, es fácil perder la confianza y dar un paso atrás, especialmente si la confrontación te genera ansiedad.
Para reaccionar de forma asertiva, es crucial mantener la calma, escuchar con apertura y reafirmar tu posición con confianza.
La importancia de la calma y la apertura
El primer paso es mantener la calma. Si alguien disiente contigo, no significa que estés equivocado; simplemente tienen una opinión diferente.
No te avergüences ni te enojes, sino que acepta su desacuerdo con tranquilidad.
El segundo paso es estar abierto a escuchar su punto de vista. Es posible que tengan un argumento que no habías considerado, lo que puede enriquecer tu perspectiva.
Al escuchar con apertura, demuestras respeto por la otra persona y por su opinión.
Reafirmando tu posición
Después de escuchar a la otra persona, debes reafirmar tu posición con confianza. Si su argumento te ha convencido, está bien cambiar de opinión.
No debes sentirte débil por ello; la flexibilidad es una señal de madurez y de que valoras la verdad por encima de tu propio ego.
Si, por el contrario, sigues creyendo en tu opinión, debes reafirmarla con confianza y, si es necesario, aceptar el desacuerdo.
Esto demuestra que respetas la opinión de la otra persona, pero que no vas a dejar que afecte tu propia posición.
La clave es aceptar que no siempre se llegará a un acuerdo, pero que se puede mantener la relación intacta a pesar de ello.
Resumen
Cuando alguien disiente contigo, es fácil perder la confianza, pero e
reaccionando al desacuerdo