El feedback en las habilidades comunicativas

Siempre nos estamos comunicando queramos o no, con nuestras palabras e intenciones a verbalizar, y otras en las que con un solo gesto o microexpresión facial son delatados nuestros deseos o aspiraciones. En este video trataremos el feedback dentro de las habilidades comunicativas, elemento de primordial orden para la conformación de un mensaje constructivo. Expondremos cómo dar y recibir una retroalimentación de manera apropiada evitando las críticas o un feedback negativo. También qué hacer y qué no para aprovechar al máximo la situación comunicativa tenida con amigos, familiares, compañeros o incluso jefe, en nuestras conversaciones diarias.

Componentesde la comunicación.

En una comunicación existe siempre el EMISOR: el encargado de transmitir la información; el MENSAJE: la información dada, el RECEPTOR, el que como su propio nombre indica, recibe la información, el CÓDIGO: el lenguaje y el CANAL: medio físico.

En el ejemplo siguiente, el canal sería las redes sociales, por donde llegó el mensaje de Elena diciéndonos: ¨Tengo frio¨.

¿Qué interpretamos? Que siente la temperatura exterior baja. ¿Qué pudiéramos hacer nosotros? Enviar otro mensaje: ¨ ¿no tienes con qué abrigarte?¨ y una vez el mensaje sea bien recibido, ambas partes podrán volver a responder. Pero, ¿la función del receptor es solo recibir el mensaje y actuar de manera pasiva?

A qué le llamamos feedback?

En una conversación de gran utilidad no. El receptor RETROALIMENTA lo que recibe, o sea comunica la respuesta o su opinión a ello. Si a una profesora, que acaba de ser visitada en un turno de clases, le felicitan por los logros y diplomacia con la que encauzó el potencial educativo de la asignatura, está recibiendo una retroalimentación o feedback de su proyección y experiencia profesional; es decir está comprobando la validación externa de su desarrollo en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Un feedback positivo y exacto es aquél en el que, sin lugar a suposiciones se sobreentienden las palabras y gestos, lo que trae consigo una absoluta comprensión del tema o debate a convenir.

Sin embargo, en contadas ocasiones la ¨respuesta¨ que esperamos aparece en forma de críticas u ofensas originadas por malentendidos o incomprensiones. Esto sucede cuando llevamos a cabo un feedback negativo. Cuando no somos lo suficientemente claros con la persona o esta interpretó en determinadas señales, tu respuesta y por tanto oposición al tema. Influyó el sesgo subjetivo del receptor. La retroalimentación debe dar como resultado un estado neutro y positivo, sin lugar a emociones negativas que entorpezcan la sana comunicación, derivada en acciones de curiosidad, interés y sorpresas. Revisémonos si nuestros feedback terminan envolviéndose en el polo negativo.

Cómo dar feedback?

Entonces llegamos al tema central de la cuestión. ¿Cómo dar un feedback claro y directo?

Entendemos el feedback como: opinión y respuesta, no como un consejo. Si una persona te dice: ¨estoy muy mal¨, un feedback seria: ¨Pareces alterado, que tal si te acuestas y relajas un poco¨, en lugar de ¨tómate una pastilla¨. La persona quiere, como a un niño chiquito, que lo entiendan y sentirse comprendido. Opina, no des consejos. Y como ¨das¨ en el origen etimológico de la palabra no implica ¨recibir¨, no esperes un gracias o una respuesta inmediata a lo que declaras. Recalco, no le diste un consejo, fue una opinión, por eso si la persona decide hacerte caso o no, no es asunto tuyo.

Cómo recibir feedback?

Al ser la respuesta del receptor una información con grandes dotes de subjetividad entendemos que no es 100 % verdad, incluso podrá no tener nada que ver con la realidad. Siempre escucha y acepta pero tampoco vivas en función de los comentarios ajenos. No es como si un músico dejara de escribir canciones solo porque a su amigo melómano no le gustó. Eso si, si muchas personas te dicen lo mismo. ¡Cuidado! Las intuiciones y más cuando se asemejan entre ellas, hay que escucharlas. Tampoco se puede ser necio. Otro dato a tener en cuenta es que si alguien nos dice ¨tienes mala cara, ¿y si no vas a trabajar hoy?¨ Si sigues esa consideración, acepta hasta el final que fue tomada bajo tu responsabilidad.

Feedback negativo.

Un feedback negativo se instala en nuestras mentes cuando, por miedo a que la otra persona crea que nuestro punto de vista está errado pudiera ofenderse. Lo importante del feedback es precisamente eso: devolver, devolver con educación y amabilidad. No tienes que especializarte en la materia, si no eres jardinero tu opinión sobre las begonias no tiene porqué ser la acertada, pero sigue siendo tu visión del mundo, importa y hay que respetarla. Intenta no modificar lo que quieres decir, y des la respuesta opuesta a tus principios. Si ya dijiste que no te gustaba su música, y tu amiga sigue llorando, no te retractes con un: ¨Pero bueno, ahora que lo escucho mejor, creo que si, me gusta y mucho¨.

Qué hacer y qué no hacer?

El Feedback se puede aprender a formular también como un elogio; elogias su trabajo duro, el cumplimiento de metas o una ayuda desinteresada, que más que decirle: ¨Estoy muy orgullosa de tus avances¨, ¨queria felicitarte¨ o ¨excelente gesto¨.

Lo único que no debemos hacer es elogiar en exceso, si la persona no acredita un cumplido no lo hagas, y menos cuando se trate de tareas básicas que forman parte de su obligación, resultaria poco creible. Si vas a hablar de algo, siempre con calma y asegurándote que sea una información relevante. No desmotives ¨criticando¨, siempre declara tus argumentos de manera constructiva, sin indirectas o enjuiciamientos.