Los minerales en la calidad de vida
Los minerales son uno de los grupos de nutrientes más importantes para la salud humana. Al interactuar con nuestro organismo, estos reaccionan a favor de una amplia gama de las funciones biológicas que se suscitan en el interior de nuestro cuerpo. La carencia o déficit de minerales está relacionada con la aparición de muchísimas enfermedades que pueden llegar a ser letales para nuestro organismo. Los minerales poseen algunas características distintivas, una de ellas es que no pueden ser sintetizados por nuestro organismo, esto nos hace dependientes de un suministro constante de los mismo para lograr cumplir con los requerimientos diarios que demanda nuestro cuerpo.
La mejor manera de adquirir este nutriente es a través de una adecuada ingesta de alimentos, balanceados y nutritivamente ricos. No obstante, los minerales también pueden ser suministrados mediante diversos suplementos nutricionales en caso de ser necesario. Es importante que aprendamos a distinguir entre los minerales conocidos como macrominerales y los llamados microminerales, esto con el fin de que sepamos ajustar las cantidades que consumimos de este tipo de nutriente, atendiendo a las características de cada uno de estos grupos.
Para entender más a fondo el papel tan importante que tienen estos nutrientes para nuestra salud, estaremos abordando algunas de las funciones básicas que realizan estos y los aportes y beneficios atribuidos a su consumo.
Funciones generales de los minerales
Abordar las funciones que realizan los minerales en nuestro organismo, requiere en cierta medida, que particularicemos en las propiedades de algunos de estos. Cada mineral cumple una función determinada, es por ello que estaremos repasando este punto desde una visión general, resaltando algunos de los aportes integrales de este nutriente para el beneficio de nuestra salud.
Los minerales actúan en prácticamente todos los sistemas y estructuras del cuerpo humano. Como ejemplo tenemos a minerales como el Calcio o el Magnesio, los cuales participan activamente en el fortalecimiento de nuestros huesos y dientes. Otros minerales como el Sodio, el Cloro, el Potasio y el Fósforo, participan en el control y la estabilización de diversos líquidos orgánicos extracelulares e intracelulares.
Por referirnos a otras funciones generales atribuidas a los minerales, tenemos que:
- Colaboran en la obtención de energía a través de los distintos procesos metabólicos que se desarrollan en nuestro organismo.
- Participan en el fortalecimiento de nuestro sistema inmunitario, ayudándonos a enfrentar y prevenir la aparición de diversas enfermedades.
- Mejoran los procesos digestivos de nuestro cuerpo, equilibrando los ácidos de nuestro estómago.
- Constituyen un nutriente esencial para los procesos de crecimiento y desarrollo.
Macrominerales y microminerales
Las clasificaciones de macrominerales y microminerales aluden a los dos grupos en los que se dividen los minerales esenciales. Es importante que entendamos que esta división no responde al nivel de importancia que presenta cada grupo, sino a las cantidades de estos nutrientes que precisa nuestro organismo para trabajar de forma saludable. Mediante el consumo de una dieta correctamente balanceada y rica en este tipo de nutrientes, podemos acceder fácilmente a las cantidades que necesitamos para satisfacer nuestros requerimientos diarios.
Los macrominerales son el grupo de minerales que se necesitan en mayores cantidades. Estos se encuentran integrados por el Sodio, Potasio, Cloruro, Fósforo, Calcio, Azufre, Magnesio.
Los microminerales o los oligoelementos, como también se les conocen, son el grupo de minerales esenciales que no son necesarios en grandes cantidades, por lo que su consumo es más moderado que el de los microminerales. Estos se encuentran integrados por: Zinc, Hierro, Selenio, Yodo, Manganeso, Cobre, Floururo, Molibdeno y Cromo. También suelen incluirse otros muy necesarios, en cantidades pequeñas, como el níquel, el cobalto, el silicio y el vanadio.
minerales