Consejos
Cuando se trata de elaborar y presentar un discurso, es crucial prestar atención a los detalles y disfrutar del proceso para lograr un resultado final impresionante. Sin embargo, alcanzar una comunicación clara y efectiva puede ser un desafío. Se requiere dedicación, repetición y trabajo constante.
En esta sección, exploraremos algunos de los errores más comunes que pueden afectar negativamente la primera impresión y ofreceremos soluciones inteligentes para aprender de ellos y prevenir su aparición en el futuro.
Lenguaje no verbal: Para demostrar que dominas el tema que vas a explicar, es importante prestar atención a tu postura corporal. Si agachas la mirada, te muestras encorvado o gesticulas demasiado o muy poco, puedes transmitir inseguridad. Para corregir esto, sigue estos sencillos pasos:
- Endereza tu postura hasta que sientas que tus hombros están rectos.
- Asegúrate de que tus piernas estén paralelas a tus hombros.
- Da un pequeño paso atrás con el pie izquierdo.
- Coloca tus dedos en forma de triángulo, como si estuvieras juntando las yemas. Una vez que hayas adoptado esta posición, usa gestos naturales y apropiados para complementar tu discurso.
Sinceridad: La sinceridad al transmitir emociones es fundamental. Si no eres auténtico al mostrar tus emociones, las personas pueden notarlo. Para enfocar tu energía de la manera correcta, sigue estos pasos:
- Elige una palabra clave en la frase y dale un ademán y entonación determinados.
- Por ejemplo, al decir ‘Las vibraciones son muy importantes’, puedes enfatizar la palabra ‘vibraciones’ colocando suavemente la mano sobre el pecho mientras la pronuncias.
- Asegúrate de transmitir el mensaje con la emoción adecuada. La misma frase puede tener diferentes significados dependiendo de si se dice con alegria, tristeza, indiferencia, etc.
Reflexión: ¿Alguna vez has tenido dificultades para entender a alguien que habla muy rápido? Es importante tener en cuenta el ritmo adecuado al expresarte:
- Un ritmo lento puede generar interés y es adecuado para fomentar la reflexión y la expectación.
- No hables demasiado despacio el objetivo no es alargar innecesariamente lo que pudieras haber dicho en menos tiempo.
- Un ritmo rápido es adecuado para motivar a la acción, como cuando decimos: “Entonces ahora todos vamos a crear un hábito y no pararemos hasta conseguirlo”. Esta frase la diremos más rápido para destacar su urgencia.
Volumen e intensidad de la voz: Cómo usar tu voz para captar y mantener la atención de tu audiencia:
- El volumen de tu voz: Al igual que el brillo de tu dispositivo móvil con una bateria al 100%, tu voz debe proyectarse, vocalizarse y ser alta y clara al inicio. No se trata de gritar, sino de hacer que te escuchen.
- La intensidad de tu voz puede disminuir a medida que avanza el discurso, pero despidete con la misma fuerza incluso más de las que iniciaste la presentación.
Errores comunes: ¿Cómo corregir errores comunes al dar un discurso?
- Estructura tu discurso y elabora una historia que involucre a tu audiencia para evitar improvisar y olvidar detalles importantes.
- Evita usar muletillas como “ehmm, este… o sea”.
- Memoriza tu discurso o al menos ten claridad en las ideas principales y argumentaciones.
- Al introducir la presentación, haz alusión al problema detectado y a las necesidades manifiestas, centrándote en el pasado y preguntándote: ¿Por qué tuve este problema?
- Al desarrollar el discurso, céntrate en el presente: Tengo este problema.
- En las conclusiones, el futuro te dictará: ¿Qué haré o cómo solucionaré ese problema?
Practica: Mejora tu vocalización y pronunciación:
- Habla con claridad: Articula claramente al hablar para evitar errores al pronunciar diptongos o triptongos debido a una mala vocalización.
- Practica: Puedes mejorar tu vocalización practicando con trabalenguas o colocando un palillo de madera entre tus dientes. Esfuérzate por pronunciar las palabras de manera clara y correcta para comunicarte de manera efectiva.
- Adopta una buena postura: Una buena postura puede ayudarte a hablar de manera más natural. Practica con amigos y familiares e intégralo en ti para que no suene falso o hipócrita.
- Evalúa tu progreso: Grábate y trabaja en mejorar cualquier aspecto que necesite atención, por insignificante que parezca. Enfócate en un solo aspecto a la vez para concentrarte mejor y poner tu mejor empeño.
- Simula las condiciones reales: Si tu discurso se hará de pie, practica en esa posición para que puedas recordar ciertos gestos o palabras importantes y hablar con fluidez sin tener que detenerte a pensar qué hacer.
consejos