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Sistemas de órganos afectados por la falta de sueño

Muchas personas solo logran apreciar los efectos de la falta de sueño en las afectaciones en su estado psicológico, esto les infunde la falsa creencia de que los malestares asociados a la depresión, ansiedad, falta de concentración, pérdida de memoria, estrés, entre otros, son de carácter pasajero y que son los únicos efectos que sufren al no descansar adecuadamente. Los cierto es que este pensamiento está muy lejos de la realidad.


En primer lugar, las afectaciones antes señaladas no deben ser minimizadas, ya que dañan de forma considerable a nuestra calidad de vida y constituyen un factor de riesgo de gran peso ante el desarrollo de diversas enfermedades crónicas. La falta de sueño es tan letal para la salud humana, que impacta en distintos sistemas de órganos como el sistema inmunológico, el cardiovascular, el cerebrovascular, entre otros. Durante el desarrollo de la presente guía nos centraremos en el impacto que tiene la falta de sueño en nuestra salud, atendiendo a los sistemas de órganos antes señalados.




Afectaciones al sistema inmunológico por la falta de sueño

Uno de los sistemas que más sufre en el organismo humano, a causa de la falta de sueño, es el sistema inmunológico. Este sistema es el encargado de crear las defensas que necesita nuestro organismo para combatir de forma natural a los distintos agentes patológicos, como virus o bacterias, que ocasionan la aparición de diversas enfermedades.

Distintos estudios han analizado el impacto negativo que tiene para nuestras defensas biológicas el encontrarnos bajo la ausencia de sueño. Los diversos cambios hormonales que se experimentan en nuestro cuerpo ante este fenómeno, nos conducen a debilitar las capacidades de reacción de nuestro cuerpo para combatir estas enfermedades. En cambio, cuando nuestro cuerpo ha descansado por al menos 8 o 9 horas, se evidencia un claro fortalecimiento de las barreras de nuestro sistema inmunológico.




Afectaciones al sistema cardiovascular por la falta de sueño

El sistema cardiovascular es otro de los que se ve afectado de forma significativa a causa de la falta de sueño en nuestro organismo. Las enfermedades cardiovasculares representan aproximadamente el 50 por ciento de la mortalidad total de la población a nivel mundial. Son varios los estudios científicos que han logrado relacionar a la falta de sueño con uno de los factores de riesgo de más peso para la aparición de distintas enfermedades cardiovasculares.


Dentro de las enfermedades cardiovasculares que más muertes causa, se encuentra el infarto de miocardio. Se estima que el trastorno del sueño puede aumentar entre dos a tres veces las probabilidades de sufrir un ataque al miocardio, por lo que, junto al tabaquismo y la falta de actividad física, no dormir suficiente es otro de los elementos que debemos eliminar si deseamos aumentar las probabilidades de vivir una vida sana.




Afectaciones al sistema cerebrovascular por la falta de sueño

El sistema cerebrovascular puede verse afectado por distintos factores de riesgos, que en muchas ocasiones son comunes a los del sistema cardiovascular. Tal es el caso del tabaquismo, que al tupir las arterias y aumentar la presión arterial, provoca un mayor riesgo de infartos en el corazón y en el cerebro. De igual manera sucede con la falta de sueño, esta es peligrosa para nuestro sistema cerebrovascular, aumentando entre una a cuatro veces las posibilidades de sufrir un infarto cerebral.


Teniendo en cuenta lo antes mencionado, es fácil percatarnos de cómo subestimamos los efectos de la falta de sueño, a causa del nivel de desinformación que tenemos. Ya que los trastornos que ocasiona este en nuestro organismo suceden de forma progresiva, es complejo percatarnos del daño que le hacemos a nuestro cuerpo manteniendo este mal hábito de vida.


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